Este pastel o lasaña de berenjena lo he comido un montón de veces en mi casa de la mano de mi madre. Es una delicia y muy sencilla de preparar. Por ello hoy os comparto este plato para que pongáis en práctica cuanto antes. 

Estad atentos al paso a paso que ahora os detallo.

INGREDIENTES 4 raciones

• 2 berenjenas medianas (600 gr aprox).
• 200 gr de mozzarella en lonchas o rallado.
• 200 gr queso rallado para gratinar.
• 500 ml de salsa de tomate casera.
• Orégano seco al gusto .
• Albahaca fresca al gusto.
• Sal.
• Aceite. 

ELABORACIÓN:

Lavar bien las berenjenas y cortar en rodajas. En un sartén a fuego medio y con un poco de aceite, hacer la berenjena a la plancha. Cuando las saquemos salar un poco y reservar. 

Cubrir el fondo de la fuente de horno con salsa de tomate casera y espolvorear un poco de orégano. A continuación, poner una capa de berenjena, sobre ella una de mozzarella y cubrir de nuevo con tomate y orégano. Puedes añadir a la salsa de tomate un poco de albahaca fresca troceada, es opcional. Ir haciendo capas hasta terminar con el queso rallado que cubra la última de las capas y que se gratinará en el horno dándole un acabado especial al plato. 

Meter al horno precalentado a 180º C, calor arriba y abajo, durante 30 min. Colocar en la parte media del horno, al final del horneado podemos subir la bandeja para facilitar un gratinado más dorado. Atentos en este proceso para que no se queme.

Dejar templar fuera del horno unos 10 minutos para cortar con más facilidad y servir. 

Consejos:

Berenjenas:

• Puedes hacer el corte en rodajas o transversal y el grosor al gusto, más o menos fino.
• Ayúdate de un pincel para aplicar el aceite en las berenjenas, no te pases ya que absorben mucho y queremos que sea ligero, no grasiento. Si no tienes pincel, echa un poco de aceite en la sartén y repártelo con un papel de cocina.
• Ten cuidado de no quemar la berenjena. Solo queremos que se cocinen ligeramente y queden blanditas. Saldrán varias tandas y te llevará cada una, 5 minutos mínimo, dependerá del grosor. 

Queso: utiliza el que más te guste. Solo asegúrate que funda bien y sea cremoso. Puedes jugar con mozzarella, queso curado rallado, queso de cabra… lo dejo a tu elección. 

Busca una fuente apta para el horno, de tamaño mediano y profunda para que te quede una lasaña jugosa. 

Aguanta en el frigorífico perfectamente de 3 a 4 días, dependerá de tu frigorífico y lo que enfríe.

Se puede congelar. 

Es un plato muy rico y sencillo de realizar que te apetecerá preparar más de una vez. 

Si os surgen dudas sobre la receta o tenéis alguna inquietud que queráis compartir, recordad que tenéis el correo electrónico a través del cual os podéis poner en contacto conmigo: gastrolibreta@gmail.com. Si queréis compartir alguna receta es bienvenida.

¡Ánimo mis cocinillas!

Gracias por leerme.