
La pastela de pollo la descubrí en un restaurante marroquí de Madrid y me enamoró. El restaurante con la pandemia ha cerrado. Una pena, ya que era un sitio con mucho encanto y solía ser lugar de quedada con mis amigas.
Siempre he querido hacerla en casa, pero nunca me había animado. Tomando de inspiración la receta de Loleta, he elaborado esta delicia para que la podáis hacer también en casa y la disfrutemos todos.
Se trata de un pastel de origen marroquí, con una crujiente envoltura de pasta filo y relleno de pollo especiado con toques dulces, rematado con azúcar glas y canela que os encantará. Que no os asuste la cantidad de ingredientes. En un plato que merece mucho la pena y si tenéis una comida especial, sorprenderéis para bien.
INGREDIENTES 4 o 6 raciones.
- 600 gr de pollo en trozos medianos.
- Un poco de harina.
- Sal y pimienta.
- 30 gr mantequilla
- 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
- 1 cebolla y media.
- 2 cucharaditas de canela en polvo.
- 1 cucharadita de ras el hanout.
- 1 cucharadita de miel.
- 4 ciruelas pasas.
- 4 orejones
- 1 puñado de pasas.
- 450 ml de caldo de pollo.
- 50 gr de almendras crudas.
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra.
- 2 huevos.
- Un paquete de pasta filo
- 50 gr de mantequilla derretida.
- Azúcar glas y canela en polvo para espolvorear por encima.

Pelar y cortar la cebolla en trozos pequeños y reservar. Picar con un cuchillo las ciruelas, los orejones y las pasas.
Salpimentar los trozos de pollo y enharinar. En una cazuela poner las 4 cucharadas de aceite y los 30 gr de mantequilla a fuego fuerte. Cuando esté caliente sellar el pollo y reservar.
En esa grasa de freír el pollo, pochar bien la cebolla que habíamos cortado, hasta que se dore. A continuación, añadir las ciruelas, los orejones y pasas picados. Agregar la canela y el ras el hanout y remover bien. Poner la cucharadita de miel y volver a echar el pollo en la cazuela. Remover todo, agregar el caldo de pollo y un poco de sal. Probar de sal y ajustar. Dejar cocinar a fuego medio durante 30-40 min. Dependerá del tamaño de los trozos de pollo, pinchar para ver que está tierno.
Retirar el pollo y dejar enfriar un poco. Reducir la salsa 10-15 min para que espese.
En una sartén con una cucharada de aceite, tostar las almendras crudas partidas hasta dorarlas, y reservar.
Retirar los huesos, cartílagos y piel del pollo y con ayuda de un cuchillo o tijera, picar el pollo. En un cuenco mezclar el pollo picado, con la salsa que habremos reducido, los huevos batidos y las almendras tostadas. Remover todo y dejar reposar 5 minutos.
Precalentar el horno a 180ºC.
Se necesitan 2 hojas de pasta filo por paquete. Extender una hoja de pasta filo y con ayuda de un pincel, pintar con un poco de mantequilla derretida. Superponer otra hoja de pasta filo, pincelar de nuevo con un poco de mantequilla y colocar en uno de los extremos estrechos un montoncito de relleno. Doblar los bordes largos hacia dentro e ir desde la parte estrecha, doblando en varias veces hasta cerrar el paquete. Continuar haciendo paquetes hasta terminar el relleno. Puedes realizar de 4 a 6 paquetes. Si haces cuatro será plato único y contundente. En mi caso salieron 5 paquetes.

Colocar los paquetes en una bandeja de horno con papel o silicona reutilizable y pincelar con mantequilla derretida. Hornear a 180ºC durante 20 minutos.
Sacar del horno y dejar enfriar 10 minutos. A continuación, espolvorear azúcar glas por encima de cada paquete y una pizca de canela en polvo.
Listo para disfrutar.

Consejos
- Te recomiendo que tengas todos los ingredientes preparados y cortados para facilitar la realización de la receta.
- Puedes hacer los paquetes que quieras y del tamaño que quieras. Un paquete de masa filo trae entre 8 y 10 hojas.
- Mantén tapadas las hojas de filo con un poco de papel de cocina humedecido para que no se resequen. Son muy delicadas y finas.
- Si te sobra alguna ración, caliéntala en una sartén a fuego medio y con una tapa, para devolver ese crujiente tan delicioso. Si lo haces en microondas, quedará un resultado más gomoso.
- Guardar en la nevera en un recipiente hermético 3-5 días. El azúcar glas con los días se puede ir absorbiendo y desaparecer de la vista.

Poder compartir esta receta me hace muy feliz porque es uno de mis platos preferidos y aprender a hacer una receta, te permite disfrutar de ella siempre que quieras. Y eso pretendo, que disfrutéis y mucho cocinando éste y muchos otros platos que comparto en este blog.
Si conocéis el plato, os va a encantar y si no habíais oído hablar de la pastela, os va a sorprender gratamente.
Si os surgen dudas sobre la receta o tenéis alguna inquietud que queráis compartir, recordad que tenéis el correo electrónico a través del cual os podéis poner en contacto conmigo: gastrolibreta@gmail.com. Si queréis compartir alguna receta es bienvenida.
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¡Ánimo mis cocinillas!

Una respuesta a “Pastela de pollo”